Los consumos de objeto artístico, la crítica trincona y el circo de fieras famélicas, han dejado un panorama nuevo (que cada cual ajuste su termómetro de maniqueísmo). Las galerías cierran, otras se agarran a las firmas de fuego y a cualquier clavo, por indecente y tramposo que sea (supervivencia), pero a la vez florecen, crecen, se amplian y multiplican las colas multitudinarias a las puertas de los museos. Quizá los resultadistas sentencien: las galerías cierran porque no venden y el personal va a los museos por sus grandes propuestas expositivas....bueno. Pero como seguro que la realidad no es tan sencilla, aportamos otro elemento: el placer de estar en la calle y disfrutar de la calle. El pudor y la sospecha habitual (alguien en un banco o es un depravado o un obeso mórbido armado con pistolas de fogueo) impiden la contemplación de la calle. Así que nosostros y nuestros amiguitos y amiguitas proponemos unas cuantas vistas a la calle....a calles sin museos in front....al exterior...con curiosidad.
la otra Dubai Victoria Verdier
Nuestra querida Victoria nos presenta así la otra Dubai...si ahora pica "esta Dubai" pues rasca y gana en http://www.flickr.com/photos/vickyver17
Y de los calores orientales a ese frío aparente de la Suiza invernal. Buscando el calor que esconde esa puñetera ventana en reflejo....y esa farola ayuna.....y la otra ventana.....y el disparo y zás.
Frío en Ginebra Nacho Contreras
Por buscar el calor, encontramos casualmente lo que queda del corazón de Castilla...en paro cardiaco secular.
ruinas de Castilla Tapat22
LO DICHO.....váyase usted a la puta calle y luego recorra los museos, los centros comerciales, los metros o las hectáreas de naves industriales....pero no disfrace el disfrute....que eso vale como disfunción.
