En ese mirar y volver a mirar, que es remirar ad infinitum (pero con trampas), nos ha venido a la cabeza un programa de aquellos. "Mirar un cuadro", el youtube tiene pocas consideraciones con la bisutería. Se podía ver en aparatos que se iban en una agonía de rojos o verdes (color). Aquellos tubos montados en garajes o desvanes por los más avispados (como Gates y cía, pero ayunos de I+D+I). Volviendo al recuerdo.... Aquella charla ilustrativa, las imágenes, el museo....La referencia adolece de la falta de nitidez del propio programa (si se consigue rescatar en alguna imágen de las pocas que circulan por la red). Pues así, con la cabeza abierta en canal, nos hemos dispuesto a estrenar nuestro programa piloto: "Mirar un plato", y con el plato en el cuadro nos ahorramos la charla, el docto conocimieno y la orientación. Entre las diferencias que dejan cuadro y plato está el deseo, el hambre, el aroma, la densidad y la presentación (24 más)......el cuadro, casi siempre, en vertical y el plato (perdón creadores ingrávidos) en horizontal.