CUANDO TODO CABE EN UNA LATA

Con LOS QUE NUNCA ESTUVIMOS EN LA RESIDENCIA DE ESTUDIANTES seguimos dispersos por el abismo expositivo. Ese enorme agujero negro que limita al norte con las galerías en retirada y por levante con las grandes exposiciones de los enormes museos (donde el tiempo de cola, y no su longitud, supera la estancia y el disfrute....una versión tosca del cortejo, porque las obras están ahí...pero la gente también...y todos a la vez). Al sur y al este...nada

Hasta el 3 de junio estamos con unas pinceladas de surrealismo, al aire del siglo XX, sin afán alguno de modernidad (con poco ismo...por su rima en equidad), pero con firme propósito de homenaje a todos y a nosotros los primeros (es lo que manda el escondite), sin olvidarnos de buñueles y dalíes. Así que en foto o en collage Alberti patasarriba cabalga una pajarita; un ojo se relaja en patxarán casero, el corazón de un grafitero adivina piezas industriales, al lado, un derechazo que destroza una mandíbula y un árbitro observa como cenicienta abrillanta las grietas de un mapa político. Y hay más: un patio con el cielo en alquiler, la niña apestada bajo las fregonas de colores, un travesti reflejado en nolotil, un mecánico (de imitación) voltea un plato de alubias mientras San Pedro se asombra y el abecedario surfea un cuaderno de caligrafía inglesa.

Estos días que la Residencia de Estudiantes cumple 100 años puedes celebrarlo con una visita a RAYUELA (C/ Morería 8 de Madrid) hay obra original por 100 euros.....y pasa de los suecos.


OBRA QUE NO PODRÁS COMPRAR EN RAYUELA (¡¡¡¡hasta el 3 de junio!!!) PORQUE YA ESTÁ VENDIDA.