EN FIN, EL O EN EL
Lo más parecido a la eternidad que conocíamos por aquí ha desaparecido entre mordiscos de tierra parda. Así, en invierno con niebla y letanías, lágrimas de incensario y ese barroco rural del que vuelan las gárgolas. El suelo blando abrazó la edad finita. La verja blanca dejó a oscuras el rojo de las rosas, el verde, la palidez amarilla de una boca cerrada. Certificamos con un aluvión de detalles salteados el fin de una era.....una era sin aditamentos sociológicos, una era.... y lo que vió y vivió hicieron que fuese y será. Otro día alumbraremos, hoy buscamos calor.... que no quedan fotos en blanco y negro.