LOS TECHOS DE PAPEL

A cubierto, siempre a cubierto, que ni el sol ni los otros nos vean, ni nos rocen. Nos pasamos toda la vida haciendo barricadas, cavando y callados. Solo queremos llenar paredes de color o de sombras; pintar un par de sonrisas y hablar, hablar y hablar hasta acariciarte las entrañas, con cuidado. Y el tiempo, solo el tiempo, adobado con casualidad y perseverancia rompen...para no volver. Entonces nos recostaremos sobre el óxido.

Oxido 24, Tapat22

NOTA: Esta y otras fotos necesitan una pared. Apadrina una instantánea.